Como calcular los kwh de los electrodomésticos
Poner la lavadora, tener encendido el frigorífico las 24 horas del día o dejar enchufada la televisión es algo que consume energía, pero ¿te has preguntado cuánto dinero exactamente nos supone al mes? O, ¿sabrías calcularlo o a qué recurrir para hacerlo? Cómo calcular los kWh de los electrodomésticos es una pregunta que se ha hecho muy frecuente entre los consumidores, sobre todo desde que afrontar la factura de la luz se presenta como todo un reto para la familia media en los hogares españoles.
Y es que cada vez estamos más pendientes del precio de la luz, y hablar de consumo fijo o permanente, precios por kilovatio o peajes por acceso a la energía es cada vez más común entre una sociedad que, hasta hace relativamente poco, actuaba con excesiva automaticidad pasiva ante el pago de ese recibo que viene a casa o se carga en nuestra entidad bancaria. Desde nuestro portal Precio Luz queremos poner en tu conocimiento que, sabiendo una información básica y teniendo en cuenta una serie de variables, podrás medir tu consumo eléctrico y aplicar los resultados para usarlos de la manera más eficiente. ¡Verás como pronto empiezas a notar el ahorro!
Cómo calcular los kWh de los electrodomésticos: la importancia de hacerlo
Contenidos
- 1 Cómo calcular los kWh de los electrodomésticos: la importancia de hacerlo
- 2 Métodos principales de calcular los kWh de los electrodomésticos
- 3 El método de cálculo kilovatios/hora a partir de los vatios
- 4 El método mecánico: los medidores de energía
- 5 Algunos aparatos concretos
- 6 ¿Hay otras formas de saber el consumo de nuestros electrodomésticos?
Calcular los kWh de los electrodomésticos es entender exactamente el gasto que supone usarlos. Puedes hacerlo tú mismo y, al contrario de lo que inicialmente puedas pensar, no necesitas grandes conocimientos técnicos: bastará con tener nociones básicas de matemáticas para poder estimar tus cifras de gasto, con base a factores como la tarifa de la luz que tengas contratada, el precio que efectivamente pagues por los kilovatios que consumas y los impuestos que se aplican de manera general a los consumidores en concepto de usuarios de energía eléctrica (contador, acceso a luz…).
De cualquier modo, actualmente cuentas tanto con dispositivos especializados como con herramientas de mucha ayuda como websites y aplicaciones (poner enlace a APP) que incluyen calculadoras en las que, solo introduciendo esos datos, conocerás el resultado de inmediato sin que tengas que formular nada. Veámoslo con detenimiento.
Métodos principales de calcular los kWh de los electrodomésticos
Hay varios métodos para calcular los kWh de los electrodomésticos. Lo conveniente es leer cada uno de ellos y elegir el que mejor se adapte a tu perfil de usuario y nivel de conocimiento técnico. Todos ellos tienen una característica en común: requieren que conozcas unos datos previos objetivos, como el precio de la luz de hoy, a los que puedes tener acceso mirando tus facturas de la luz, buscando en el propio cuerpo del electrodoméstico, en su manual de instrucciones, por internet y por diferentes aplicaciones como Precio Luz. Los dos métodos de cálculo de kilovatios/hora más usados son:
- El método de los vatios o los amperios
- El método mecánico
¿Sabías qué…?
Los electrodomésticos más modernos tienen la obligación de incluir la etiqueta azul y blanca (en EE.UU. es amarilla y se denomina «EnergyGuide»), que ha ido pasando por varias iconografías distintas (de la A a la G, a la E, a las A+++, A++ o A+) pero siempre con la lógica de los colores del semáforo como seña de identidad. ¡Si está rojo, párate!
El método de cálculo kilovatios/hora a partir de los vatios
Solo necesitas una calculadora, que puede ser normal o, como nosotros te recomendamos, una calculadora especialmente pensada para este tipo de cálculo, como la que puedes encontrar en la aplicación Precio Fijo (es totalmente gratuita).
- Busca el vatiaje medio del dispositivo. Si muestra un rango, quédate solo con una cifra media. Por ejemplo, para el rango «200-300 W», usa 250 W.
- Multiplícalo por las horas de consumo al día. En caso de los frigoríficos, el cálculo es de 8 horas (un tercio del tiempo del que están enchufados físicamente), que son las que efectivamente está consumiendo.
- Divide el resultado entre 1000. El resultado que obtengas serán los kilovatios/hora (kWh) al día que consume tu electrodoméstico. Multiplícalo por tantos días como quieras saber: por 30 para un mes, 365 para un año…
- Infórmate sobre el precio de la luz de hoy y multiplícaselo a los kilovatios/hora que has obtenido.
Pero, no encuentro los vatios por ninguna parte
No te preocupes, suele pasar. Si no encuentras los vatios, vamos a buscar los amperios y realizar los cálculos con este sistema.
- Localiza los amperios (A), denominado como «entrada», sobre todo en cargadores y móviles.
- Busca el número de corriente que pertenece a tu región (en España es de 220 W, pero en otros sitios como Canadá, por ejemplo, es de 110 o, en EE.UU., de 120).
- Multiplica los amperios por los voltios de tu región, para obtener los vatios.
- Multiplica los vatios por las horas de uso al día (recuerda que, si es media hora, debes multiplicar por 0.5 horas).
- Divide el resultado entre 1000 y obtendrás los kilovatios/hora diarios, que puedes ir multiplicando por los días del período que quieras conocer: 30 para un mes, 365 para un año…
Truco del ahorrador: los números de vatiaje que figuran en las etiquetas o en los electrodomésticos son máximos, lo que implica que en realidad pueden ser menores. De este modo, se van acumulando cifras por encima de lo real. Además, te aconsejamos que cuando calcules el precio de la luz, redondees siempre al alza. Así, te llevarás incluso una alegría mayor, pues el resultado que obtengas será realmente más bajo del que estimes.
El método mecánico: los medidores de energía
Este sistema es más rápido, preciso y efectivo, pues mide la energía real del electrodoméstico, pero, al requerir el uso de aparatos concretos que deberás comprar, implica un poco más de gasto. A la hora de comprar tu dispositivo, lee bien las opiniones y las instrucciones de uso: asegúrate de que sea un vatímetro o medidor de kilovatios de calidad (no queremos terminar ocasionando cualquier estropicio). Un electricista te puede asesorar.
- Conecta un extremo del medidor energía a la pared y, el otro, a tu electrodoméstico o dispositivo. Conecta el dispositivo al medidor de energía.
- Pon en funcionamiento el medidor de energía según las instrucciones del fabricante y mide los kilovatios/hora. Basta con tener el medidor conectado para que el cálculo se realice. Si el resultado que arroja es en vatios, usa los métodos anteriores para reducir a kilovatios, estimar tus datos por períodos o calcular el consumo de luz en euros. Consulta el precio de la luz del día en páginas web o aplicaciones como Precio Luz y te será muy útil para saber cuánto pagas por el uso que le das a ese electrodoméstico en concreto según los datos que arroje tu medidor.
Algunos aparatos concretos
En este apartado, te vamos a dar unos datos útiles y consejos en relación a los electrodomésticos más comunes que solemos tener en casa y que te serán de mucha ayuda a la hora de cómo calcular el consumo eléctrico:
- La lavadora: ten en cuenta el programa o ciclo de lavado que usas, pues cada uno consumirá unos kWh distintos. Las lavadoras actuales incluyen programas ECO que implican menor gasto energético de por sí.
- El frigorífico está encendido las 24 horas del día. no es que consuma efectivamente las 24 horas, sino alrededor de unas 8 o 9, en la que el rendimiento es el más activo, pero sí que lo convierte en el electrodoméstico que más energía usa en nuestros hogares.
- Las secadoras y los lavavajillas también tienen ciclos concretos que ayudan a ahorrar. Además, si los usas cargados completamente disminuirás su frecuencia de uso y, consecuentemente, ahorrarás energía y dinero.
- El horno consume muchísimo, por lo que, más que tener en cuenta su vatiaje, recomendamos tener en cuenta cuándo lo usas y la tarifa del tiempo concreto en el que lo enciendes (valle, llano o punta) y que puedes consultar a diario vía web o en APP’s como Precio Fijo.
- Las placas de cocina gastan más o menos según el tipo que tengas: las de inducción, por regla general, son más caras en cuanto a inversión inicial, aunque su gasto se amortiza a medio plazo. Por su parte, las placas vitrocerámicas tienen una instalación más barata, pero que tarden más en calentarse implican un gasto de energía extra.
- En cuanto a pequeños electrodomésticos como cafeteras, tostadores, aspiradores o la plancha de la ropa, ten en cuenta que su tamaño no implica la reducción de sus kilovatios ni del precio que paguemos por ellos: utilízalos de manera eficiente y responsable, como tenerlos desconectados cuando no estén en uso. Además, es recomendable que incorporen reguladores de potencia (los modelos más baratos del mercado solo se enchufan y empiezan a funcionar, lo que supone un gasto de energía que no podemos controlar).
¿Hay otras formas de saber el consumo de nuestros electrodomésticos?
Aparte de realizar los cálculos por nosotros mismos, mediante fórmulas, calculadoras de aplicaciones específicas o con medidores de consumo, podemos ponernos en contacto con el área de clientes de nuestra distribuidora eléctrica. La distribuidora nos permitirá acceder a históricos de consumo en el que veremos hora y kWh consumidos en períodos concreto (día, mes, años). Sabrás cuál es tu distribuidora consultando los datos de tu factura.
Ahora que ya sabes cómo calcular los kWh de los electrodomésticos, es hora de poner en práctica tus conocimientos y empezar a ser consciente de tus gastos: podrás actuar de una manera mucho más efectiva y eficiente y verás los resultados en tus facturas de la luz. ¡Haz la prueba y cuéntanos la experiencia!